
MI PUENTE NO ES PERFECTO
Mi puente no es perfecto, me faltan pulir muchas cosas… Pero aún así estoy muy orgullosa de poder hacerlo.
¿Por qué te explico esto? Como sabes y siempre te comento, la voz, el cuerpo y la mente están profundamente relacionados y se influyen mútuamente. Hoy quiero hablarte de una de mis luchas y experiencia personal, relacionada con mi cuerpo, porque es perfectamente aplicable al camino que tal vez estás andando con tu voz. Espero que te sirva de inspiración.
Si has consultado mi método personal de enseñanza, habrás visto que combino varias cosas en la docencia de la voz: me baso en los fundamentos de la TÉCNICA VOCAL COMPLETA (COMPLETE VOCAL TECHNIQUE ©), los conocimientos de las emociones provenientes del COACHING Sistémico Transaccional, mi experiencia con el TRABAJO CORPORAL y mis AÑOS DE EXPERIENCIA como cantante y docente. Todas estas bases son cosas que he experimentado en mí misma y que he estudiado en profundidad.
Desde bien pequeña me diagnosticaron varias desviaciones de espalda al mismo tiempo: una cifosis dorsal de bastantes grados (también llamada hipercifosis), lordosis lumbar y además escoliosis. Des de los 10 años hasta los 14 me hicieron llevar un “corsé” ortopédico rígido y me prohibieron la gimnasia en la escuela y todo el instituto.
Crecí con la idea de que yo nunca podría hacer deporte, de que mi espalda me marcaba y me limitaba de por vida. ¿Te suena este tipo de pensamiento limitante? ¿Tal vez te resuene con cosas que piensas sobre tu voz?….
Desde los 10 años hasta los 25 aproximadamente no hice NADA de deporte ni actividad física, tenía muchos dolores de espalda y mi postura iba empeorando.
Fue a partir de los 25 años que entré en contacto con la danza del vientre y ahí se me abrió un mundo. Volví a re-conectar poco a poco con mi cuerpo y empecé un largo camino de auto-conocimiento y consciencia corporal en el cual sigo hoy en día.
Empecé a profundizar en la danza del vientre y también en otras disciplinas que me ayudaron a ganar cada vez más consciencia corporal: pilates, danza clásica, danza contemporánea, telas acrobáticas, yoga….
Uno de mis grandes descubrimientos fue que cuanto más conocía mi cuerpo, cuanta más consciencia y control corporal tenía, más consciencia y control tenía sobre mi voz. Y es que la voz está en nuestro cuerpo, cuanto más lo conozcas y trabajes, mejores serán los resultados que obtendrás con tu voz. No se puede separar una cosa de la otra: tu voz y tu cuerpo son la misma cosa.
Ahora canto mucho mejor que cuando era más joven, tengo mucha más potencia, mucho más rango y puedo hacer cosas que antes no creía posibles. Y esto es porque ahora tengo una “mejor relación” con mi cuerpo: lo escucho, lo cuido y lo trabajo. La consciencia y el trabajo corporal son fundamentales para mejorar la voz.
Dicho esto, yo no soy una “crack” del deporte, tengo mis limitaciones físicas (que te he comentado antes), pero he aprendido que las limitaciones más grandes están en la mente y que con constancia y voluntad se pueden conseguir cosas que antes parecían inalcanzables.
Yo no podía hacer el puente y pensaba que no llegaría a poder hacerlo jamás por mi espalda. Llegué a aceptar la idea tranquilamente, pero aún así llevo 3 años trabajando en él 2 / 3 veces por semana porque el simple hecho de trabajarlo notaba que me hacía bien y me iba “abriendo” poco a poco.
Un día de marzo de este año, trabajándolo como siempre, pude levantarme del suelo y casi ni yo misma me lo creía, sentí una alegría enorme. El trabajo de “hormiguita” había hecho su efecto y dado resultado… No es un puente perfecto, pero es MI PUENTE. No tiene sentido compararlo con el de otra persona con otro cuerpo y otro bagaje. Compararme con una gimnasta, por ejemplo, sería una auténtica tontería. Sólo puedo compararme conmigo misma y con el camino que he recorrido desde que me pusieron aquel corsé físico y mental.
Trabajar con el cuerpo es lento, muy lento, pero da grandes satisfacciones conseguir cada pequeña meta. Lo mismo sucede con tu voz, no lo olvides y sobretodo, no tires la toalla en cuanto las cosas no funcionen. Recuerda que tu voz es tu cuerpo y que necesita su tiempo. No te compares con Whitney Houston o Freddie Mercury, tú tienes tu propio camino. No debes olvidar desde donde partes y tienes que dar el valor que se merece a cada pequeño éxito. Constancia, constancia, constancia y regularidad. No dejes de creer en ti. ¡Lo conseguirás!
Si quieres aumentar tu consciencia y conocer en profundidad cómo funciona tu voz, ahora tienes la oportunidad de hacerlo cómodamente desde casa con la nueva edición de mi curso MÓDULOS DE TÉCNICA VOCAL COMPLETA (Complete Vocal Technique).
Una formación de lujo en grupo reducido que te permitirá conseguir todo aquello que habías imaginado con tu voz.
Comentarios recientes